Esta semana ha tenido de todo. Antes de ayer en los vestuarios de las pistas de atletismo del Campus Sur de la Universidad de Santiago alguien, mientras yo tenía mi merecida ducha de 3 minutos tras un entrenamiento bastante fuerte, me robó los pantalones vaqueros; digo los porque eran aquellos que me había comprado en las Rebajas que tanto me gustaban y por los que, cosa que nunca hago, fui el 1º día a buscarlos cuando estaba ElCorteinglés a reventar de gente deseosa de comprar.
Me parece una vergüenza que ocurran estas cosas; menos mal que es una minoría la que actúa así. Lo peor es que lo hicieron casi delante de mis narices... Eso sí, he aprendido y no volverá a ocurrir aunque tenga que ir en toalla hasta el pasillo para coger las cosas en la taquilla. Parece mentira, voy a tener que contratar a un guía incluso para vigilar la mochila.
Menos mal que llevaba unas mallas largas (cosa que no suelo hacer porque no me gustan) y pude tener algo para vestir; si a esto añadimos que tenía vez para ir al CTG a donar plaquetas Y PLASMA a las 7pm... Bueno, quedémonos con que el entrenamiento había sido muy bueno y con que a alguna persona le habrá servido la unidad de plaquetas y a mi me mandarán los resultados de la analítica en unos 15 días como siempre.
Las personas que van a una instalación deportiva para robar cosas y no para hacer una actividad saludable no merecen más espacio en este blog.
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