Aquí estoy de nuevo tras muchas semanas sin escribir en las
que ha habido novedades que iré contando poco a poco pues merecen entradas
individuales.
Estoy ahora en Sierra Nevada en una concentración de 3 semanas
que empezó el 21 de abril y que terminará este jueves cuando viajaré a Águilas
para disputar un par de carreras el fin de semana (ITU World Paratriathlon
Event y Cto de España de Acuatlón).
Dos son mis grandes objetivos para este 2016, objetivos o
sueños según se mire y hoy voy a hablaros del primero de ellos.
El 5 de Febrero viajé a Madrid con mi madre para hacer el
día 6 el examen MIR de acceso a Formación Sanitaria Especializada. Después de
muchos meses de preparación en la academia AMIR primero en el curso presencial
y luego a distancia me desplacé a la capital con el objetivo de pelear las 235
preguntas del examen tratando de rentabilizar al máximo el tiempo de estudio
dedicado el cual distaba mucho del realmente necesario. Junto con otros
compañeros de MIR, FIR, PIR, EIR, con necesidades educativas especiales realicé
el examen en el Ministerio de Sanidad… Después de un buen desayuno y pasar toda
la mañana del sábado paseando por el Jardín Botánico llegó el momento de
entrar, de repartir los cuadernos de preguntas e imágenes, de nervios, de tranquilizarse,
de coger el bolígrafo y responder, de mirar al techo, de comer mis barritas
Kinder… y de terminar en poco más de 5h de las 10 que debido a mi problema de
visión tenía para hacer el examen. Si las hubiese empleado todas habría
enloquecido!.
Cansada de leer fuimos al hotel. Echaba de menos no estar en
Santiago de fiesta con los amig@s de la Facultad y trataba de dormir cuando a
las 5 los nervios e incertidumbre me hicieron meter la plantilla en el
corrector de la academia… Una primera aproximación a un resultado definitivo
que tardaría semanas en conocer cuando el 30 de Marzo salieron las
calificaciones definitivas. 4830 de más de 11000 opositores para 6098 plazas…
Quizás podría haber sido mejor y convencida estoy de que una dedicación full
time hubiera traído un resultado diferente pero con eso tendría que elaborar mi
lista para la elección de Plaza y también valorar la opción de repetir el
examen.
Los días pasaban y hacía y deshacía la lista. Llamé a varios
Servicios de Rehabilitación de diferentes hospitales en Galicia, en Madrid,
Valencia, Barcelona, Bilbao…. Tenía claro que quería hacer pero también muchas
ganas de quedarme en Galicia… El 28 de Abril en jornada de tarde era el turno
en que me tocaba elegir. El 27 me reuní en Madrid con mamá una vez más y estaba
vez también con mi hermana a quienes agradeceré eternamente el haber estado
conmigo esos dos días de nervios. Nunca habría imaginado la tensión de ese
momento ni de los previos… Tenía una lista con varias opciones en Galicia, en
Madrid centro y el Hospital de Cruces en Barakaldo y durante la mañana del día
en que me tocaba elegir toda mi lista excepto mi segunda opción que era
Rehabilitación en Santiago y otra plaza en H de Cruces se habían ido acabando….
Al mediodía estuve llorando en la habitación del hotel, sin saber que hacer,
deseando con todas mis fuerzas no tener que repetir y a la vez deseando que se
eligiese la plaza de Cruces para no verme en la necesidad de elegir entre
repetir o irme… Supongo que esta situación es dura para cualquiera.
A las 14h bajamos hacia la zona del Ministerio donde me
encontré con mi amigo Cristian de Santiago y con mi amigo Álvaro que ya había
elegido rehabilitación en Valencia. Nos llamaron y entramos. Era una sala
grande con butacas en semicírculo, muy iluminada y con un proyector enfrente
donde iban colocando la plaza que elegía cada uno a la vez que la decían por
megafonía. Había una mesa con varios ordenadores y personas del Ministerio a
quienes tenías que, llegado tu turno, decir cual era tu elección, ellos la
buscaban con un código y si estabas conforme le dabas a “ENTER”.
La sesión empezó en el 4600… 230 números quedaban hasta el
mío que fueron pasando poco a poco mientras hablaba con mi hermana por el
WhatsApp, mientras mamá miraba la página en su móvil y papá lo hacía desde
casa. Esa mañana Uxía Fernadez, una compañera de la Facultad, estuvo animándome
y diciéndome en reiteradas ocasiones que había plazas que esperaban por las
personas y que la mía iba a ser una de esas… Cuando quedaban menos números me
hacía ilusiones pero a la vez tenía más miedo de no conseguirlo… Finalmente nos
llamaron a un grupo de 12 personas de las cuales yo era la última. Poco a poco
los compañeros fueron eligiendo y cuando el 4828 elegía Medicina de Familia
pregunté a la chica de delante que iba a hacer y me dijo: Familia en Toledo….
Fue en ese momento cuando me di cuenta de que lo iba a conseguir. Cuando me
preguntaron que quería les dije. Medicina Física y Rehabilitación en el
Complejo Hospitalario univ de Santiago de Compostela. Introdujeron el código de
la plaza y me acerqué la pantalla para leer que los datos eran correctos; fue
entonces cuando le di a “ENTER” y no os podéis ni imaginar la sensación de
alivio, felicidad, ilusión, emoción que sentí. Creo que hasta me cayeron un par
de lágrimas… Recogí el papel y salí de allí…
No sé si todavía soy consciente de lo que esto significa
para mí… Es un sueño hecho realidad, algo por lo que he luchado sin descanso
desde el día en que decidí echar mi preinscripción para cursar Medicina en la
USC. Nunca hubiera imaginado ese momento y se lo quiero dedicar a todas las
personas que siempre han confiado en mí, especialmente a mi familia.
Cuando empecé eché de menos tener referentes, alguien en que
fijarme para que me ayudase a creer que sí iba a ser capaz. Quizás ahora pueda
ser yo el referente para otras personas y si es así me sentiré orgullosa y
feliz por ello.
Una lupa, un telescopio, un flexo, un atril, un ampliador de
pantalla, una telelupa, un lector, unas gafas de sol y toneladas de trabajo
pero da igual, VALE LA PENA TANTO…
Tengo unas ganas enormes de que llegue el día de empezar, de
seguir aprendiendo para ayudar, de volver a Compostela para continuar
creciendo… Estoy muy contenta.
